Las consecuencias de la DANA han dejado una huella imborrable en las poblaciones del sur de Valencia, donde más de 120.000 vehículos han sido severamente afectados por las gravísimas inundaciones. La devastación ha sido tal que muchos testigos recuerdan con horror cómo sus coches flotaban como barcos, arrastrados a merced de la furia del agua. Estos vehículos, que representan el pan y sustento de numerosas familias, han quedado reducidos a escombros, sumidos en el barro y apilados en un paisaje desolador.
La situación se ha convertido en una trampa mortal para muchos conductores que intentaron escapar del desastre, buscando refugio en zonas más altas o intentando salir de plazas de garajes subterráneas. Sin embargo, la fuerza del agua no perdonó y los coches quedaron atrapados, enterrados y desperdigados por doquier. Este panorama no solo afecta a los propietarios de los vehículos, sino también a taxistas y transportistas que dependen de sus coches para trabajar y ganarse la vida.
Desde Fucarauto, se reconoce la magnitud del problema y se espera que haya soluciones rápidas para todos los afectados. El coche es un medio indispensable de transporte y su pérdida representa un golpe duro ante una catástrofe de tal naturaleza. Los vehículos han quedado como juguetes en manos de corrientes de agua, lo que agrava aún más la situación.
Los afectados recibirán indemnizaciones basadas en el valor venal de sus vehículos, un cálculo referenciado en las pólizas de seguros conocido entre los profesionales como el valor Ganvam. Este valor se utiliza como referencia oficial en todos los canales de venta, aseguradoras, juzgados y administraciones públicas. Además, el Consorcio Compensación de Seguros (CCS) incrementará este valor venal en un 20%, lo que podría ofrecer algo de alivio a quienes han perdido tanto.
No solo los particulares han sufrido daños; también se estima que alrededor de 40 concesionarios locales han visto cómo aproximadamente 18.000 vehículos almacenados en sus instalaciones han sido dañados por las inundaciones. Esta situación ha llevado a la improvisación de desguaces donde miles de coches están amontonados, muchos destinados a convertirse en chatarra. Sin embargo, hay quienes todavía albergan esperanzas: algunos vehículos podrían ser reparables si las condiciones lo permiten.
En medio del caos, surgen iniciativas positivas como la creación de páginas web para geolocalizar los coches afectados mediante un mapa interactivo. Un ejemplo es tucochedana.es, donde los propietarios pueden localizar sus vehículos perdidos.
Nuestro mayor deseo es que tanto la administración como las aseguradoras tomen cartas urgentes en el asunto y ofrezcan soluciones inmediatas a todos los afectados. La recuperación será un proceso largo y complicado, pero es fundamental actuar con rapidez para ayudar a quienes han visto cómo su medio de transporte se convertía en una víctima más del desastre natural.
Fucarauto, la cadena de talleres mecánicos con 3 centros de referencia en Huelva, te recomienda los pasos a seguir si tenemos algún imprevisto en la carretera, bien sea por accidente o porque el coche nos deje literalmente “tirados” en el arcén.